Continuando
con el artículo anterior, terminaré por hacer referencia a los últimos
acontecimientos más relevantes del año que se fue, tales como la rocambolesca
huida y posterior detención por entregas de Martín Belaunde Lossio a pesar de
los infructuosos intentos del Ministro de Justicia Daniel Figallo de
convertirlo en Colaborador Eficaz y que le costó el puesto a la procuradora Yeni
Vilcatoma. La detención preventiva del Fiscal Dante Farro involucrado en el
caso Centralita, así como la destitución de Ramos Heredia máximo mandatario del
Ministerio Público. Y por fin, las detenciones de los huidos Jorge Burgos y
Evaristo Chauca, ambos por el caso Centralita y que son la excepción que
confirma la regla de la inoperancia de nuestra policía en ese ámbito de
persecución de los prófugos de la Justicia. Y es a finales de ese año cuando
empiezan a dispararse los hasta entonces aislados casos de agresiones a los
representantes de la autoridad, sobre todo a la uniformada, ya sea de sexo masculino
como femenino, tanto los agresores como los agredidos, que de todo hay. Las
sanciones ahora drásticas y muy severas tratan de parar lo que empezaba a tener apariencia de
epidemia, al mismo tiempo que devolver la dignidad, respeto y obediencia debida
a quienes visten el uniforme y representan la autoridad conferida. Estas faltas
de respeto que llegan al grado de agresión tanto verbal como física evidencian
la degradación de valores éticos y sociales a que se está llegando y que nos acompañan en el día
a día. Y ya no digamos, si afectan como ha ocurrido precisamente aquí, a la
máxima autoridad del Estado.
Y como colofón del año, transición con el
siguiente, y entrada con buen pie en el nuevo, el 25 de diciembre lo iniciamos
con un Estado de Emergencia o Excepción que hizo las delicias de los alcaldes y
fuerzas reaccionarias que lo solicitaron ante la alarma social existente. Alarma
originada por los flagrantes casos de los asesinatos de Samanco, los
continuados casos de corrupción de funcionarios demostrados judicialmente y
finalmente la vergonzosa evasión de la acción de la Justicia de esos mismos
funcionarios. Y digo delicias, pues lo confirma la intención, no sé si ya
realizada, de mandarle una carta de agradecimiento al presidente Humala, por su
toma de decisión. Decisión, que con toda mi admiración a las fuerzas del orden por la
profesionalidad que están mostrando en su actitud respetuosa con el Estado de Derecho
y prudente actuación con la población civil, de poco sirve en referencia al
origen de la petición, reitero: alarma social existente. Que no tenía nada que
ver con la micro comercialización de droga ni con las tramas delincuenciales
existentes, que siempre han existido, y que ahora son la “ley motiv” de la
actuación policial. Aquí hay que recordar dos cosas. Una, es que fue el
anterior Presidente Regional y acólitos, ahora en prisión preventiva, y con
visos de pasar muchos años más en ella, quienes solicitaron reiterada e
injustificadamente la implementación del estado de excepción. Y otra cosa a
recordar es que quienes en su momento, recientemente, se opusieron a que se dictara tal decreto,
ahora no saben, no contestan o echan balones fuera. El Decreto Supremo
093-2015- PCM suspende el artículo dos en sus incisos 9 y 24 apartado f de
nuestra Constitución Pólítica, que hacen referencia respectivamente a la inviolabilidad del domicilio y la
libertad individual y seguridad personal. Y el apartado f hace referencia a la
las garantías de las detenciones. Si nuestras fuerzas del orden necesitan que
se lo pongan como se las ponían a Fernando VII, vamos arreglados. A tal Rey,
uno de los más nefastos de España, al que gustaba mucho jugar y ganar al
billar, sus súbditos contrincantes en el juego debían “facilitar” sus carambolas,
unas veces distraídamente y otras no tanto, con el fin de que siempre venciera
y no enfrentarse a su ego. Aquí también parece que hay que “facilitar” siempre
las cosas para su resolución.
Una
vez entrados en este nuevo año 2016, repleto de incertidumbres donde se
celebrarán elecciones para el Congreso y Jefatura del Estado, quizá deberíamos
elevar nuestra miras de manera internacional y observar los ejemplos novedosos
que se nos muestran tanto en un sentido como en otro. En un caso tenemos a
Venezuela, con sus recientes elecciones, en las que el gobierno de Maduro, con
sus continuos desmanes ha sido materialmente barrido por una oposición liberal,
dando entrada a nuevos aires sociales. Y en sentido inverso, el caso de España
donde tras nuevas elecciones, el bipartidismo existente (PP y PSOE, derecha e
izquierda) ha sido barrido por la aparición de un nuevo movimiento ciudadano
”Podemos”, que aglutina a los anteriormente “Indignados”, y que representa una
izquierda tranquila y social que reclama simplemente sus derechos ciudadanos,
expoliados por el liberalismo salvaje y corrupto de la derecha hasta ahora
gobernante. Nuevos aires también que están soplando fuerte y convirtiéndose en
vientos reinantes. Y pregunto, ¿por qué aquí no pueden cambiar los vientos
reinantes?, ¿acaso Verónica Mendoza del Frente Amplio con su acuerdo con Fuerza
Social, Partido Socialista y Partido Comunista Peruano, o el empuje y juventud de
Julio Guzmán de Todos por el Perú, no son suficiente aire renovador para este país.
Es muy posible que en estas próximas
elecciones continuará más de lo mismo, pero atención a las del 21, en las que
los vientos pueden cambiar y barrer con tanto inmovilismo. Y los ejemplos los
acabo de dar. Lo que les explico a continuación es lo que me lleva a pensar
entre otras muchas cosas, que aquí y ahora los vientos son lamentablemente los
de siempre.
A
todo esto resulta que la Contraloría General de la República está organizando
para celebrar a primeros de febrero una Conferencia sobre la Corrupción. Y
agárrense ustedes, los ponentes son : un tal Alan, otro tal Alejandro, otra que
tal Keiko, otro que se hace llamar Pedro Pablo y finalmente el más pequeño,
César. Pónganles los apellidos y habrán acertado. Todos ellos muy documentados
en el tema. El organizador es Fuad Khoury máximo Contralor de la República que
con esta selección de conferenciantes se ha retratado ante el país.
Todo
hace pensar que éstos, los elegidos, podrán disertar sobre su amplia, profunda
y documentada experiencia sobre el tema
central: la corrupción. También es de suponer que por todo lo contrario, por su
falta de experiencia, no han sido invitados el resto de los quince aspirantes a
la Presidencia de la Nación, cosa que supuestamente agradecen. Bienvenida sea
la inexperiencia.
Moraleja:
”La corrupción no es obligatoria”, (Robinson Jeffers)
Así
sea.
EL
VIGÍA
No hay comentarios:
Publicar un comentario