viernes, 29 de marzo de 2013

ARTÍCULO: "ODISEA EN EL CENTRO DE LA CIUDAD"

¿Quieren leer una odisea? Acompañenme un momento.
Nos encontramos en el centro de la ciudad, en una de las vías mas transitadas, exactamente en la Avda. José Pardo, en la esquina con el Jr. José Gálvez en dirección hacia la Plaza de Armas, ante el paso de peatones. Tenemos el semáforo en rojo y junto a él hay un policía de tráfico. Esperamos pacientemente para pasar. El movimiento de vehículos es muy intenso  y es hora punta. Por fin el disco se pone verde. Iniciamos nuestro camino por el paso de peatones pero tenemos que detenernos inmediatamente porque por nuestra izquierda aparece repentinamente un colectivo ( con la P ) que procede de la Avda. Pardo e invade el paso y lo cruza rápidamente, con el consiguiente susto para nosotros; al reanudar otra vez nuestra marcha aparece otro vehículo de la misma procedencia, esta vez particular, que nos obliga también a pararnos en seco tras dedicarnos una sonora pitada por atrevernos a pasar cuando él quiere hacerlo. No salimos de nuestro asombro cuando al intentar llegar al centro de la calzada aparece otro colectivo ( también con la P) que además de rozarnos y pitarnos nos  obsequia con un soez insulto. Atención amigos, todo  esto está ocurriendo con el semáforo en verde para nosotros, los peatones.
 Por fin estamos  llegando al centro de la calle cuando ¡! Oh , Dios mio ¡! aparece un cuarto energúmeno que haciendo gala de sus buenos frenos y claxon  los utiliza a fondo parando a escasos centímetros de nuestras piernas. Nuestros sudores, no sólo por el calor isufrible, se incrementan sensiblemente. Ahora si, hemos conseguido llegar a la mediana de la calle y respiramos profundamente: ya tenemos el camino libre hasta la vereda  de enfrente pues los vehículos están parados ante su semáforo que está en rojo.!! Odisea ¡! ¡¡Hemos  conseguido cruzar la calle intactos ( aunque con un pequeño roce ) ¡¡. Así que hemos ido de susto en susto y afrontando riesgos que no tienen razón de ser. Son centenares de peatones los que cruzan diariamente pasos de cebra señalizados y con semáforo en nuestra ciudad, afrontando esa situación .
Ni que decir tiene el incremento de riesgo que conlleva cruzar por los pasos señalizados pero sin semáforo. Entonces el riesgo es mayúsculo, no sòlo de ser rozado, pitado o insultado por el “Fittipaldi” de turno sino por la elevadísima posibilidad de acabar en el hospital.

Estos pésimos conductores ( por sus infracciones les conoceréis ) me da la sensación que son numerosos y parecen desconocer una serie de cosas básicas y fundamentales, como son: que los giros hay que hacerlos con precaución, por muy verde que esté su semáforo de salida y que los peatones en el paso señalizado o peatonal siempre, absolutamente siempre, tienen prioridad o preferencia de paso sobre los vehículos; que el claxon no puede utilizarse indiscriminadamente para anunciar su presencia y sólo debe usarse en caso de extrema necesidad; que está prohibido circular en “punto muerto” para aprovechar la inercia  y ahorrar combustible y siempre obligatoriamente siempre, debe llevarse una marcha engranda para mayor seguridad y control del vehículo; que para ahorrar combustible además de un inflado de ruedas correcto deben utilizarse marchas largas o lo que es lo mismo: no apurarlas nunca. Que las paradas y estacionamiento deben hacerse siempre a la derecha de la marcha; y  en fin, que la entrada y salida de los pasajeros en los vehículos también se hará siempre por la derecha.

Da la sensación que los brevetes han sido muy “breves” en su preparación, conocimiento y examen. Mas bien se diría que los reparten en rifas, ferias o tómbolas, Así que no es de extrañar que una gran cantidad de conductores de nuestra ciudad incumplan el código de la circulación y sean un auténtico peligro para  los peatones. Aquí conviene recordar que los peatones también tienen sus obligaciones que deben cumplir aunque no suelen ser un peligro para los coches. Mas bien al revés. Que quede bien claro.

Se me olvidaba.  Al principio he mencionado que junto al semáforo había un guardia de tráfico. Pues bien, como si no estuviera.Ni ordena, ni corrige esas infracciones, ni protege a los peatones como es su obligación. Permanece impasible y cuando nos dirijimos a él y recriminamos el poco civismo de los conductores, asiente, se encoge de hombros y dice:“No saben el código de la circulación ”. Eso es todo.
Estoy totalmente de acuerdo con él.Y ustedes lo estarán conmigo en que el que parece no saber su función es el guardia.

Ahora pacientes peatones no me queda mas que decirles que si quieren ser testigos directos de una aventura similar no tienen mas que dirigirse a esa esquina de la Avda Pardo y la verán y, si lo que les gustaría, les aseguro que con subida de adrenalina incluida, es ser actores principales de tal odisea lo único que tienen que hacer es intentar cruzar el mencionado paso de peatones ……………….. con guardia incluido.

Moraleja:!! Sálvese el que pueda y, el que no, al hospital !!.


viernes, 22 de marzo de 2013

ARTÍCULO: "LA LÓGICA DE UN NIÑO DE CUATRO AÑOS"

Uno de mis hijos, el más pequeño que tiene cuatro años se llama Pedro Walash que en quechua quiere decir Pedro el Niño. Va al  cole desde los dos años, es muy despierto y está en esa edad en la que empieza a preguntar todo.
El otro día viene y me dice:” Oye papá, ¿ que es un chorizo?”. Me quedé pensativo y le contesté: “pues un chorizo es un embutido hecho con carne picada “. Me contestó: “No papá, la miss del colegio nos ha dicho que es un señor malo“. Mi sorpresa fue grande al oir a mi pequeño y entonces rectifiqué: “ Mira hijo, lo que dice tu señorita es verdad pues también se le da el nombre de “chorizo” a la persona que es mala, que roba o quita las cosas a los demás”.
“Entonces, continuó Walash, el señor taxista que nos quitó y se llevó en su coche el bolso de mi hermana con su teléfono móvil, su MP3, mis libros y los de ella que acabábamos de comprar así como  nuestras gorras y cantimplora ¿ es un chorizo? “
Mi hijo estaba recordando lo que nos ocurrió el pasado 25 de febrero cuando al apearnos brevemente del taxi en el que íbamos, para recoger a mi hija que estaba en la zona, el taxista sin más y consciente de lo que hacía se dio a la fuga con todas nuestras pertenencias. Así que le contesté: “ Si hijo, aquel señor era un “chorizo”por que nos quitó nuestras cosas”.
Walash asintió y seguidamente preguntó: “Papá, y los fiscales ¿que hacen?”. Mi sorpresa se iba incrementando y le dije: “¿ Por que me preguntas eso? Es que en clase hemos hablado de los policías, los chorizos y los fiscales.Yo se papá que los policías detienen a los malos, a los chorizos, pero no tengo claro que hacen los fiscales“.
“Pues mira hijo, los fiscales son unos señores que tienen el trabajo de protegernos, de defender nuestras cosas o nuestros derechos y para eso les pagamos”.
Walash se quedó muy pensativo y me soltó: ¿ y los fiscales pueden ser unos “chorizos”?.  Su pregunta me desarmó y terminó de romper todos mis esquemas mentales y tardé en contestarle. Volví a preguntarle: ¿Por qué me preguntas eso Walash? Su contestación fue: “Porque el fiscal no  me devuelve mi gorra y la cantimplora, ni a mi hermana su teléfono y su MP3”. Se olvidó de los libros .
Si digo la verdad, me costó reponerme ante la lógica inocente aplicada por mi pequeño. Le contesté:”No hijo, los fiscales siempre son los buenos, son los que nos protegen y nunca pueden ser los malos”.
No fui capaz de decirle la cruda realidad pues no la hubiera entendido. Que en la Fiscalía, como en todas las profesiones y con todos los respetos,  hay “buenos” o mejor dicho excelentes profesionales que son la mayoría que trabajan mucho y muy bien; los “mediocres”, que son aquellos que según como ven el caso y su complejidad  hacen algo o no y por último están los “malos”  que son los que ”no dan un palo al agua“, apenas trabajan o se les supone que sin intencionalidad, lo hacen rematadamente mal y por lo tanto desprestigian a la Institución, haciendo que con sus acciones u omisiones  los ciudadanos en general y los cuerpos de policía en particular se sientan, los primeros defraudados (no hará falta recordar que son esos mismos ciudadanos los que les pagan su sueldo ) y los segundos desmoralizados unas veces y desautorizados otras.
Con la aparición del Nuevo Código Procesal Penal ( N.C.P.P.), en mi opinión se ha incrementado el número de los “malos por la inclusión en ese grupo,  de los “mediocres” ya que, insisto, en mi parecer les facilita o predispone a la inhibición o a la inacción en sus tareas y funciones como servidores públicos, que no son otras que la persecución del delito y la defensa de la sociedad.
No estoy diciendo que el N.C.P.P. sea malo, no digo eso, digo que facilita la inhibición, “el lavado de manos “ al estilo Pilatos, el garantismo ingenuo y finalmente el “archivo de causas” haciendo que éstas permanezcan en el limbo de los olvidos .

Veamos brevemente el caso aludido. Caso Nº 3106014503-2013-298-0 (Hurto por valor de mas de dos mil soles)
Ante la denuncia presentada en la Comisaría , el Sr Fiscal la despacha diciendo: ” NO PROCEDE FORMALIZAR NI CONTINUAR CON UNA INVESTIGACIÓN PREPARATORIA. ARCHIVESE “.
Y ¿ por qué se archiva?. No por falta de delito, tampoco por no ser justificable penalmente, y mucho menos por presentar causas de extinción. Se hace porque  a las dos semanas de ocurridos los hechos “NO SE HA PODIDO IDENTIFICAR E INDIVIDUALIZAR  A LOS PRESUNTOS AUTORES DEL HECHO MATERIA DE LA DENUNCIA“. En otras palabras: no he cogido, ni llevado de las orejas al “chorizo”. Y no digo cogido de otro sitio mas delicado por  temor a ser denunciado por daños.
Por otra parte me recuerda “QUE UNA INVESTIGACIÓN PRELIMINAR POR LA PRESUNTA COMISIÓN DE UN HECHO PUNIBLE NO PUEDE PROLONGARSE INDEFINIDAMENTE , SINE DÍE “………………………..” POR LO QUE CRITERIOS DE CERTEZA, EFICIENCIA Y DESCARGA PROCESAL HACEN ACONSEJABLE DAR POR CONCLUIDA LA INVESTIGACIÓN“.
¿Pero de que investigación habla, si no la ha iniciado todavía?
Por último, me recuerda que según el N.C.P.P “EL ARCHIVO SE HACE ENTRE OTRAS COSAS PARA EVITAR LA SOBRECARGA DEL FISCAL Y TAMBIÉN PARA NO CREARME EXPECTATIVAS IRREALES “.
Y sobre todo no hay que perderse el final: “EVITAR INUTILMENTE HACERME PERDER MI TIEMPO “.
Prefiero no hacer comentario alguno .
Pue bien, si ante la denuncia presentada en la que se incluyen datos suficientes como son el contenido de las dos conversaciones telefónicas que mantuvimos con el presunto“chorizo” más los números también telefónicos, que aporté, con los que estuvo manteniendo durante dos días largas y reiteradas conversaciones (tuve la precaución de no cortar la línea), repito si con todos estos datos hay que archivar el caso mejor será que apaguemos la luz y nos vayamos a dormir pues el fiscal lleva ya días roncando profundamente.
La verdad es que se me ha quitado el sueño ya que tengo que darle una solución a mi Walash. No debo decirle la verdad: “El fiscal nos dice por nuestro bien que no perdamos el tiempo, que es muy difícil coger al “chorizo” y que lo que mejor podemos hacer es aguantarnos.”
Creo que será mejor que le diga: “Hijo, al “chorizo” ya lo han cogido y como ha perdido las cosas, nos comprará otras”. Aunque la realidad sea que las pague de mi bolsillo.
Tras todo lo dicho amigo fiscal, no puedo incluirle entre los “malos” ya que carezco de los datos suficientes para hacerlo, pero seguro que tampoco entre los “buenos”. Así que ya sabe en el grupo en el que muy benevolentemente le incluyo por su actuación.

 Deseo que mi pequeño peruanito Pedro Walash se eduque en la confianza de que hay una Justicia recta y honesta defensora del honrado ciudadano de a pie, al mismo tiempo que persigue y castiga al delincuente.
Espero que con el tiempo, al hacerse adulto, cuando tenga pleno uso de su razón, mi querido Walash vea que lo que le decía su papá era verdad: que la judicatura y por lo tanto la justicia, en los estados de derecho, entre los que debe incluirse a Perú, está siempre al servicio del buen ciudadano, protegiéndole y defendiendo sus bienes y derechos, incluidas  gorras, cantimploras, teléfonos móviles, MP3 y por supuesto los libros.
Así sea.