lunes, 27 de enero de 2014

ARTÍCULO: ECONOMÍA


Como recordará el asiduo lector, Poli, la señorita que empezó como nuestra chica de servicio y se convirtió, con su buen hacer y mejor corazón en un miembro más de nuestra familia, decidió compartir sus actividades laborales con los estudios, con el objeto de labrarse un mejor futuro y que además apoyamos con nuestros mayores deseos y facilidades.
Está terminando la secundaria y hay alguna asignatura que se le hace más costosa de entender, como por ejemplo es la Economía. Y es que en verdad hay conceptos que aparentemente son bastante enrevesados para el hombre de la calle y los estudiantes se hacen auténticos líos a la hora de entenderlos y sacar las verdaderas y reales conclusiones de lo que nos explican los sesudos economistas, que si lo hicieran más sencillito, esos conocimientos estarían como debe ser al alcance de cualquier mortal. Al menos los conocimientos básicos para entender lo que se dice o publica en la prensa. ¿Por qué será que la sección de economía es tan difícil de “digerir” y sobre todo de entender, y la mayor parte de los lectores la pasan rápidamente sin leer más que los titulares? Pues sencillamente por todo lo anteriormente expuesto. Y la verdad es que los titulares dejan bastante que desear pues sus verdades son a medias y en muchos casos deformantes de la realidad, como más tarde veremos. Pero volvamos con Poli.
Me dice: “Eso del PBI me parece algo complicado de entender”. Y le pregunto: “que es lo que entiendes o te han dicho que es?”. Me contesta: “nos han explicado que es el Producto Bruto Interior”.  Continúo: “ y tú qué crees que es eso”. Confieso que por el nombre que se le ha dado a ese concepto esperaba que la contestación de Poli, que es muy avispada, fuera dirigida hacia alguna prenda intima interior deteriorada o algo similar. Pero no, no fue así, se encogió de hombros y dijo:” Vigía, no lo sé, es algo relacionado con el dinero, pero no sé más”. El caso de Poli, es el caso de la gente en general, que no saben que sí saben, que las cosas son más fáciles de lo que parecen o nos quieren hacer que parezcan. Y lo único que hay que hacer es explicarlo con lenguaje sencillo y al alcance de cualquier persona. Veámoslo.
Así pues, el PBI (en Europa llamado PIB) es simplemente el conjunto de todo lo que producimos y consumimos en el país. Es su riqueza . Desde las camisas o calzones que compramos, pasando por el sueldo que ganamos y terminando por los minerales que extraemos y vendemos, sin olvidarnos del cebichito y cervecita que nos tomamos de vez en cuando, forman el PBI del Perú, en total más de 204 mil millones de $. Como decía antes, todo, absolutamente todo cuanto producimos lo conforman. Todo este PBI se sustenta en cuatro grandes patas, que difieren unas de otras según su contenido, aunque al final siempre son dineros que se cuantifican en dólares.
Estas cuatro grandes patas son: El CONSUMO, LA INVERSIÓN, EL GASTO PÚBLICO, Y LAS EXPORTACIONES NETAS. Veamos cada uno de ellos.

EL CONSUMO. Consiste en el dinero que gastamos en vestimenta, colegio, médico, medicinas, transporte, impuestos, ocio, restaurante, vacaciones etc, etc, Hay que tener claro que si consumimos más se produce más. O sea que el aumento de la producción dependerá del incremento de nuestro consumo. Y el aumento de producción aumentará el número de empresas y por lo tanto de trabajadores.
LA INVERSIÓN. Consiste en los dineros que se gastan en ampliar o crear nuevas empresas, adquirir nueva y moderna maquinaria, montar una tienda, crear infraestructuras  viarias, crear polos de desarrollo industrial, desarrollar nuevas investigaciones, etc, etc. Una mayor inversión normalmente confiere una mayor producción y por lo tanto mayor número de empleos.
EL GASTO PÚBLICO. Consiste en los gastos dinerarios que hacen los organismos públicos: Gobierno, Congreso, Poder Judicial, Entes Independientes (Fiscalía, Defensoría del pueblo, etc. etc.), Regiones, y Concejos. En este gasto están los sueldos de todos, miembros del Gobierno, Congresistas, Jueces y Fiscales, Funcionarios, Docentes, Médicos y otros. También se incluye los gastos que realizan en forma de inversiones los entes como el Gobierno central, Gobiernos Regionales y Concejos. Si se invierte más en edificar colegios, construir carreteras, hospitales, veredas, desagües, etc. etc. y se administra correctamente se crean más puestos de trabajo y por lo tanto mayor riqueza.
LAS EXPORTACIONES NETAS. Consisten en la diferencia expresada en dólares del valor de lo que vendemos al exterior del país o EXPORTACIÓN, de lo que compramos y traemos del exterior o IMPORTACIÓN. Si lo que mandamos al exterior en dólares es superior a lo que traemos de fuera diremos que la BALANZA COMERCIAL es positiva. Cuando vendemos nuestros minerales, oro, cobre, plata, o nuestros vegetales, palta, espárragos,  quinua, etc. nos produce beneficio si su cifra es superior a lo que traemos de fuera. Este último ejercicio ha sido después de bastantes años NEGATIVO, pues hemos exportado unos 400 millones de dólares menos que el importe de lo importado.
Una vez explicado, Poli que había estado muy atenta, me dijo:”¿ Oiga Vigía, eso es así de sencillo?”. “Pues si - le contesté – es así de sencillo”. Continuó Poli: “Nos han dicho que este próximo año el PBI crecerá aproximadamente un 6%. O sea que seguiremos creciendo “
“Pues sí, relativamente Poli, porque lo que crecerá será la economía general pero la particular, la tuya, la mía y la de cualquier trabajador es posible, muy posible que se mantenga igual o peor”
“¿Cómo es eso posible, Vigía, si estamos creciendo?”
“ Pues es más que posible, real, mi querida Poli. Todo depende del REPARTO que se haga de la riqueza producida por ese crecimiento. En economía se habla muy poco del REPARTO EQUITATIVO, y mucho de crecimiento y competitividad. Para muchos seudo economistas actuales crecimiento y competitividad son sinónimo de contratos de trabajo inestables y salarios más que bajos, basura. Y no se dan cuenta que así no se va a ninguna parte, por la sencilla razón de que de esa manera nunca se incrementará el CONSUMO ya que el trabajador no gana lo suficiente para poder gastar, y lo único que se hace es concentrar ese crecimiento en unas pocas, poquísimas personas que consumen algo más, pero insuficiente, pues ya están saciadas, y no proporcionarán riqueza al país sino acaparamiento o amasamiento de fortunas. Esta es mi querida Poli, la pura realidad.
Te ampliaré algo más. Según análisis de Latinvex, basado en datos del Fondo Monetario Internacional  el poder adquisitivo por persona en Perú es de 11.403 $. Si esto se lo dices a un anciano pensionista, a un trabajador del campo, a un maestro, o a cualquier empleado de base, o se ríen de tu ocurrencia o pueden sentirse molestos, muy molestos por tu chiste. Otro titular de prensa: EL CRECIMIENTO DE INGRESOS DE LOS POBRES QUINTUPLICA A LOS DE LOS SEGMENTOS ALTOS  y concreta que entre 2007 y 2012 los ingresos de los pobres crecieron un 38% y los de mayor poder adquisitivo sólo un 8%. Hasta aquí la noticia. Lo que no dice es que antes los pobres pasaban hambre y sed y ahora sólo hambre”.
Finalmente, Poli, me mira, se ríe y me dice: “Vigía, me parece que lleva mucha razón”.
Otro día continuaremos con esto tan complejo que nos dicen que se llama Economía y hablaremos de productividad, competitividad, investigación y desarrollo.
Moraleja: “No es oro todo lo que reluce bajo el sol”
Así sea.

EL VIGÍA.  

lunes, 20 de enero de 2014

ARTÍCULO: INSEGURIDAD Y REALIDAD

                     
Cada día estamos siendo testigos de continuos asaltos, agresiones, chantajes, violaciones y asesinatos. Hoy día, por desgracia es una de las características de las sociedades modernas, dado que estamos viviendo en un mundo de violencia que ha desembocado en un clima bastante extendido de criminalidad. Decimos que existe una gran inseguridad ciudadana. Veamos que se entiende por tal.
La inseguridad del ciudadano consiste en la sensación real de temor que él tiene a ser objeto de ataque y convertirse en víctima. Esa sensación real de temor de incrementa con el riesgo existente. Así vemos que en los centros urbanos el riesgo de inseguridad es sensiblemente superior al existente en los núcleos rurales y no es precisamente porque en las ciudades haya más riqueza, que sí la hay, sino porque esa riqueza existente no se reparte equitativamente. En las zonas pobres de la sierra andina, los índices de inseguridad son bajísimos y lo son porque allí no hay riqueza alguna que repartir. Allí todos disponen de lo mismo: Pobreza, que ya está suficientemente repartida.
Cuando digo que no se reparte equitativamente me estoy refiriendo al reparto del bienestar con el trabajo, con la educación, con la salud y por lo tanto con los valores a desarrollar en el seno familiar. Esa ausencia de valores, de educación y de trabajo originan agresividad y ésta, violencia, que termina en hechos delincuenciales.
Por lo dicho hasta ahora podemos ir sacando un par de conclusiones: 1º) la inseguridad producida por la delincuencia podría disminuir si el Estado creara un mejor sistema educativo donde los jóvenes no desertaran de la escolaridad y los alejara de la criminalidad. 2º También se disminuiría la delincuencia si se ofrecieran oportunidades laborales equitativas  a todos los sectores de la sociedad, con sueldos dignos, siendo responsabilidad del Estado, municipios, gobiernos regionales e iniciativa privada.
Esa violencia y la delincuencia desencadenada son producto de sociedades injustas, y en vez de atacar a las causas que la producen, el paro, la incultura, los vergonzantes salarios, las drogas etc. lo que se hace es tratar de combatirlas con la fuerza.
Y aquí, al referirme a la fuerza, estoy hablando de la Policía, de la Fiscalía, de la Judicatura y de Prisiones. Vayamos por partes.
Hay que dejar muy claro que aquí el problema es la delincuencia y sus diversificaciones: asaltos, robos, chantajes, violaciones y asesinatos con o   sin sicarios. Éstos son el auténtico, real y veraz problema. Insisto, el problema es la delincuencia, no la Policía, ni la Fiscalía, ni la Judicatura, ni las Cárceles. No, ellos no son los delincuentes, no, aunque deberán mejorar sensiblemente sus actuaciones profesionales. Parece ser que se están confundiendo los términos y da la sensación que se hace aprovechando la coyuntura preelectoral que se avecina. Me consta el insomnio y quebraderos de cabeza de esas autoridades y agentes policiales que están trabajando día y noche con unos servicios de información prácticamente inexistentes, con una escasez de medios impresionante, y con alguna incomprensión ciudadana rayana en la esquizofrenia. Ellos podrán y deberán mejorar su actuación, pero ellos no son los delincuentes. Lo son aquellos a los que se les monta servicio de vigilancia para controlarlos, y hace falta ser muy majadero para decir que se les protege al montar esos operativos. Así pues, la policía deberá ser dotada de más medios y posiblemente efectivos mejor preparados para poder enfrentarse eficazmente al que delinque.
La Fiscalía actualmente es ese órgano independiente que tiene la misión de combatir el delito codo con codo, no a codazos, con los agentes y tener claras sus atribuciones, responsabilidades, colaboraciones y servicios que puede y debe realizar. Al parecer hay bastantes fiscales que “cojean” ampliamente del conocimiento de las atribuciones antes mencionadas. Desde sus tardanzas injustificadas al lugar de los hechos, cuales médicos impuntuales, que por cierto cada día son más, pasando por los archivamientos  inesperados de numerosos casos y terminando por las incongruentes actuaciones de falta de investigación y seguimiento del caso. Sin duda es uno de los eslabones más flojito, con honrosísimas excepciones de la cadena.
De la Judicatura, con algunas sentencias clamorosamente escandalosas, lo único que puede decirse es que su lentitud y la falta de rigor en la aplicación de la Ley, hacen de ella, pilar que debería ser fundamental del Estado como tercer Poder que es, un sistema que carece ante la población de la credibilidad que se le supone. Las actuaciones profesionales del Presidente de la Corte, sin duda en su perfecto derecho de hacerlas al remover a ciertos Jueces, que lejos de ser premiados parecen ser castigados, hacen que al no querer ser razonadas para conocimiento del ciudadano que le paga y al que siempre se le debería dar una explicación, crean suspicacias y desconfianzas además de antipatías nada buenas para el Sistema Judicial. Las explicaciones nunca están de más, y menos en los servidores públicos que no deben contemplarlas como una sumisión a nadie sino como una expresión de la grandeza de su autoridad.
Finalmente el Sistema Penitenciario está total y completamente obsoleto, fuera de contexto, con Centros desde donde se “marcan objetivos”, se planifican y se ordenan hechos delictivos de la mayor entidad, y que lejos de ser centros de rehabilitación se han convertidos en Universidades del delito con múltiples especialidades a poder seguir.
Si a todo eso unimos la falta de participación ciudadana en acciones de seguridad, escasa confianza en las autoridades civiles, inoperancia del COPROSEC, ausencia de solidaridad ciudadana, bajo nivel de instrucción, salarios bajos, inestabilidad laboral, deterioro de los valores sociales y finalmente la corrupción imperante con los diezmos y los 20%, tenemos un cuadro donde se refleja la situación actual: Una sociedad fracturada, rota, sin ilusión, donde hay que ser “vivo” para poder supervivir, y denostar y mal ver al que es honesto y trabajador. Esta es la pura  realidad y con esta realidad es difícil evitar la aparición de delincuentes, pues cada día irán surgiendo nuevas remesas de jóvenes dispuestos a incorporarse a la vida disipada y fuera de la Ley. Cuanto digo, es compartido por sociólogos, pedagogos, abogados, periodistas, jueces, policías, en fin profesionales serios y competentes que saben que, no es tan fácil como parece eliminar la delincuencia. El problema hay que abordarlo seriamente en su origen y de otras muchas maneras en las que se evite la marginación juvenil, la droga, la “viveza”, el paro, la violación, la promiscuidad, y en fin todas las bajezas que acechan y que han sido producto de la corrupción. Si, de la corrupción, que no me cansaré de decirlo, una vez más y otra y otra y cuantas hagan falta, es la lacra y origen de gran parte de lo que está ocurriendo.
Así que por favor, menos manifestaciones de disensión, negación y desilusión y más trabajo de creación, unión y satisfacción. Y ustedes, pacíficos y asiduos lectores no se dejen engañar, pues la caperucita y su abuelita no existen y lo que hay en abundancia por desgracia son bastantes lobos feroces, muy feroces y además muy corruptos.   

Largo, arduo, difícil y cansado trabajo el que tenemos por delante pero nuestros hijos lo necesitan y además se lo merecen. ¿Están ustedes de acuerdo? Pues a trabajar, que vamos con retraso y estamos perdiendo el tren.
Moraleja:” Dime con quién andas y te diré quién eres y cuánto haces por tus hijos y cuánto te admirarán”.
Así sea.

EL VIGÍA.   

jueves, 16 de enero de 2014

ARTÍCULO: VACACIONES Y EMOCIONES.

                                 VACACIONES Y EMOCIONES

“Por fin llegaron, ya están aquí, ya era hora, hacía días que estaba esperándolas ”. Con estas palabras recibía jubilosamente mi hija que cursa estudios de secundaria la llegada de las vacaciones. En cambio su hermano, bastante más pequeño, pues sólo tiene cinco años, y ya lleva tres en el colegio, al segundo día de vacaciones me decía: “Oye papá, si no hay cole, como voy a ver a mis amiguitos y jugar con Carlitos, Matías, André, Franchesca, Mei, Pátric, Nagib, Sergio y Elio?, yo quiero volver al cole”.
Ahí tenemos una clara y diferenciada forma de entender el trabajo o estudio y las vacaciones o el ocio. Deberíamos analizar detenidamente el por qué de esa actitud tan antagónica en dos seres que no son más que la representación de miles y miles de niños, jóvenes, y no tan jóvenes, adultos e incluso maduritos que manifiestan sentimientos encontrados.
Y es que hacer algo, sea estudio, trabajo o actividad, a la edad que sea, sin motivación o emoción se convierte en algo monótono y pesado que es costoso de sobrellevar. La rutina diaria sin una elevada motivación es difícil de mantener por lo que es importantísimo que nuestras actividades se vean acompañadas de emociones que motiven y sin las que es dificilísimo trabajar, estudiar o aprender.
Una capacidad que tiene nuestro cerebro es la de recordar o aprender aquello que nos emociona y lo que no nos emociona lo olvidamos. Veamos un ejemplo: Todos recordamos perfectamente que estábamos haciendo cuando nos enteramos de la catástrofe de las Torres Gemelas, pero no de lo que comimos ese día. O sea, recordamos perfectamente aquello que nos ha emocionado pero no lo accesorio o lo que no nos emociona. Si damos emoción a lo que aprendemos seremos capaces de recordarlo con más facilidad. Así pues, si queremos que nuestros pequeños, y los no tan pequeños aprendan de verdad hemos de intentar dar emoción a aquello que queremos que aprendan.
Para mi pequeño de cinco años acudir al cole todos los días, uno tras otro, sin perderse uno, es una auténtica delicia de la que hay que dar las gracias al plantel docente que tan sabiamente le están conduciendo. Y me consta que no es sólo mi hijo sino que son prácticamente todos. Todos. Y tengan en cuenta que trabajan, si, trabajan y mucho, ya lo creo. Este mocoso, nos saca a todos de la cama a las seis de la mañana y nos urge a prepararnos para llevarlo al colegio pues vamos a llegar tarde. Su entrada al cole, es diariamente triunfal, con ganas de estar con sus compañeros, ilusión por aprender cosas nuevas, y todo esto provocado por las emociones gratificantes que le hacen sentir y vivir quienes le están formando. Ustedes, papá y mamá, tienen un rol importantísimo en el desarrollo de sus hijos. Proporcionarles cariño y afecto es lo más normal del mundo, pero debemos enseñar a nuestros hijos que aprendan a imaginarse cosas o situaciones nuevas y sentir emoción, lo que les hará aprender a tomar decisiones. La gente que no tiene capacidad imaginativa suele ser gente que tiene dificultad en la toma de decisiones pues le cuesta mucho y tiende a equivocarse muy frecuentemente.
Por otra parte también es importante resaltar que las emociones influyen poderosamente en nuestra escala de valores. Las emociones controlan a veces nuestros valores morales y éticos en contra de la razón. Veamos el siguiente ejemplo: En un campo de concentración se organiza una fuga de presos en un camión. Han de hacerlo en silencio para no ser descubiertos pero les acompaña un bebé que de pronto empieza a llorar; la razón dice que si le tapan la boca al pequeño lo ahogarán y no los descubrirán; la emoción por el contrario dice que no podemos matar al niño ya que sacrificaríamos un niño por x personas adultas para que finalmente pudiéramos morir todos.
En síntesis, el sistema de valores es inducido por la educación recibida de nuestros educadores que somos prioritariamente nosotros, los papás. Así pues, la educación es el medio por el que se modifica el sistema de valores ya que es la única forma o manera de cambiar el cerebro. Es a través de las emociones como se hace la escala de valores. Gracias a ellas, a las  emociones, construimos los valores que tenemos en nuestro comportamiento. También hay que saber que las emociones son difíciles de cambiar y que no pueden cambiarse con la utilización de la razón sino con otra emoción.
Este amplio y en este caso resumido campo de las emociones juega un papel importante lo que se denomina Inteligencia Emocional que es simplemente la combinación de nuestros sentimientos, pensamientos y comportamientos. Quien tiene Inteligencia Emocional también tiene Inteligencia Social que consiste en relacionarse fácilmente con sus semejantes y que sin Inteligencia Emocional no hay Inteligencia Social.
La Inteligencia Emocional ayuda a vivir mejor y quienes la tienen disfrutan de mayor bienestar. Y ese bienestar no es otra cosa que el equilibrio entre lo que te pides a ti mismo y lo que realmente puedes hacer.
La Inteligencia Emocional se aprende con la práctica y para ello hay que empezar conociendo las emociones propias y más tarde las de los demás.
A pesar de su corta edad, mi pequeño hace amigos y amigas por todos lados, lo que indica que tiene una Inteligencia Social muy desarrollada y nos da lecciones a todos, a mi el primero. Que si he aprendido algo de todo esto es gracias a él y a las conferencias magistrales del español Dr. Ignacio Morgado que certifica cuanto digo en este artículo.
Aprovechando Pedro sus vacaciones, se ha reunido con sus amigos y compañeros de colegio a practicar futbol y natación. Tenían que haberles visto lo felices y contentos que estaban al volver a verse después de un par de semanas de alejamiento. Los abrazos y la felicidad brotaban por doquier.
Así que tomemos buena nota, del ejemplo de nuestros pequeños hijos, nosotros los adultos que tantos y tantos problemas nos buscamos nosotros solitos por falta de introspección de nuestras capacidades  y análisis de lo que realmente podemos hacer.
A nadie se le debe pedir más de lo que humanamente puede hacer y mucho menos a los niños. Por lo tanto, mucho cuidadín con los deberes extraescolares, que a juicio de los expertos no deberían existir. Y ahora, todos, niños, jóvenes y adultos cultivemos nuestras emociones con unas buenas vacaciones y un descanso relajante, consistente simplemente en cambiar por unos días la actividad diaria. Recarguemos nuestras baterías con numerosas y motivadoras emociones.
Moraleja: “Planta tus emociones motivadoras, riégalas diariamente con valores, cultívalas con esmero y recogerás una excelente cosecha de amigos”
Así sea.

EL VIGÍA.  

viernes, 10 de enero de 2014

ARTÍCULO: SOÑAR EN LA NOCHE DE REYES.


Como hago todos los días, esta pasada noche tras contarle a mi pequeño hijo el cuento de costumbre, al tratarse de la noche de Reyes, hemos estado hablando de la llegada de sus Majestades los Reyes de Oriente, Melchor, Gaspar y Baltasar que llegarán sigilosamente para dejar juguetes a los niños buenos y, deseos muchos deseos cumplidos a los mayores de buena voluntad. Mi pequeño tiene mandada una extensa carta a Baltasar, que es su Rey, en la que tras explicarle que él ha sido bueno y aplicado le sugiere le traiga Juguetilandia toda enterita. Mi hijo me ha preguntado qué les pedía yo, y le he explicado para su entender cuáles eran mis principales deseos: salud, paz y prosperidad.
Finalmente y ya bien entrada la noche se ha quedado, mejor dicho nos hemos quedado los dos profundamente dormidos.
He soñado, cosa que hace mucho tiempo que no conseguía, cosas maravillosas, he visto imágines nunca imaginadas, secuencias vividas como si fueran reales y con la creencia y esperanza de que puedan convertirse en realidad. Paso a contarles.
Al principio del sueño me he visto paseando por una gran avenida , hermosa, amplia , sin tierra, sin polvo, bien asfaltada, sin baches, sin rompe muelles, con señales de prohibido circular a más de 40Km/h, con semáforos y pasos de peatones señalizados, con veredas amplias y ajardinadas, con bancos de los de sentarse y arbolitos con sombritas incluidas. “¿Dónde estoy?, ¿pero qué es esto tan hermoso?”. Por fin he salido de la duda, un letrero decía: Avda, José Pardo.
Que delicia era pasear por Pardo, con un silencio impresionante. Se notaba que el bando de la alcaldía prohibiendo la utilización del claxon en la ciudad había hecho efecto y sólo se oía de vez en cuando el pito que hacía gorgoritos de la agente de tráfico de turno, que por cierto estaba como siempre hermosísima con su coleta, sus gafas de sol y su ajustadito uniforme.
Decidí sentarme a la sombrita en un banco y disfrutar de la paz y tranquilidad reinante.
A lo lejos vi que se acercaba por el centro de la calzada un inmenso gentío.
Al frente, abriendo la marcha iba un apuesto militar con paso firme y marcial. Como estaba muy lejos me pareció un oficial de la PNP. Conforme se fue acercando le fui reconociendo: era el antiguo Coronel, ahora General  Aguilar, que por sus méritos había ascendido en el escalafón militar. Y es que tras un largo y difícil trabajo consiguió eliminar la podredumbre del sicariato, los ajustes de cuentas y en gran medida la delincuencia a la que había estado sometida durante bastante tiempo la sociedad chimbotana. Había conseguido con precarios medios por falta de ayuda, su buen hacer y el de algunos de sus hombres, acallar de una vez y por todas, las voces malintencionadas y desalentadoras de los agoreros y oportunistas de turno que lejos de unir y sumar sólo saben desunir y restar. ¡Con lo guapos que estarían todos ellos calladitos y sin dejarse manipular!
Seguidamente, venían unos vehículos rojos, eran varios y de diferentes tamaños. Conforme fueron acercándose logré identificarlos como coches y camiones contra incendios. Iban muy lentamente pues dada su longevidad estaban para pocos trabajos y eran empujados por sus fieles servidores: los bomberos de la ciudad, que iban uniformados impecablemente y cada uno de ellos provisto de su botellín personal de agua “San Pedrito” como medida de previsión ante la emergencia de no encontrar el líquido elemento en el lugar del incendio. Dada la escasez de agua y la falta de bocas de riego es de agradecer su alto grado de profesionalidad, cumplimentando aquel dicho que dice: “Hombre precavido vale por dos”.
Tras ellos iba una jovencita de largas coletas, con falda por encima de la rodilla, con una caperuza roja y una cestita, cogida de una velluda mano, de largas uñas, con aspecto de lobo, pero no feroz, de cuyos bolsillos con sendos forados resbalaban montones de monedas infantiles. Por  sus gestos, risas y juegos se deducía que iban departiendo amigablemente. Al pasar frente a mí y tenerlos más cerca me pareció reconocer en Caperucita Roja a la heroína de nuestra siempre querida Poli, Doña Nancy y con su disfraz de lobo, al César con su polito amarillo. Que foto tan hermosa tenían los dos juntos, antes distanciados y ahora jugando al pilla pilla y al escondite en plena calle. Me acerqué y no pude menos que felicitarles.
A continuación marchaban festivamente entrelazando sus brazos los integrantes y simpatizantes del partido nacionalista encabezados por la hermosa y laboriosa Yolanda, que junto a Nena y Flores, renacidos  de sus cenizas, iban departiendo amistosa y amigablemente como no podía ser de otra forma con Cisneros y otros nacionalistas, al mismo tiempo que risueñamente sonreían afectuosamente y saludaban al pasar. Sus diferencias habían sido superadas y el futuro se presentaba repleto de nuevas oportunidades, sin exclusiones ni falsos liderazgos.
Después venía Colmenarejo con sus “boys”, muchos removidos y todos revestidos con sus atributos de Señorías, felices, contentos y festivos, manifestando en sus sonrientes semblantes su dicha por haber terminado definitivamente sus salas plenas, huelgas blancas y manifestaciones de reclamo salarial. Podían presumir de una realidad: ser una de las primeras regiones con el índice más alto de productividad judicial. ¡Quién lo diría!
Seguían multitud de personajes, médicos, docentes, abogados, ingenieros etc etc, muchos de ellos conocidos socialmente, como el Pastor Piorno, el desarrollado Arroyo, el incansable Gascó, la dulce e inflexible Roslyn, la brava cierra antros Jazmín, la siempre atractiva ex alcaldesa Espinoza, la encantadora Luz de lnmigraciones con sus muchachos y un sinfín de regidores, políticos y politiquillos, incluido Valentín que hacían casi interminable la larga marcha.
Casi al final iban los representantes de los medios de comunicación locales como los hermanos Peláez, Teruel, Alí, Palacios y otros muchos periodistas que todos unidos mostraban su amor por su profesión y satisfacción por el continuado incremento de sus tiradas periodísticas, que se traducían en un aumento vertiginoso de lectores. Uno de los informadores llevaba una pancarta que decía: NO A  LA CONCENTRACIÓN DE MEDIOS. Y todos absolutamente todos gritaban a coro: MORDAZAS NO, LIBERTAD DE EXPRESIÓN SI. Y lo hacían con tal intensidad que llegaba hasta los oídos del “lobo bueno”, que como antes he referido iba encabezando la marcha.
Al final me emocioné, pues no fue para menos. Juzguen ustedes. La comitiva la cerraba unas pancarta que rezaban: SÍ A LA VIDA; otra que decía: NO AL SICARIATO; y una tercera: VIVE Y SE FELIZ.
Y lo más increíble eran los portadores de ellas. Agárrense fuerte que viene curva. Eran, derrotados y encadenados, los temibles “PATECOS” y las no menos delincuenciales “JAURÍAS”, que con sus líderes al frente, “Cachete”, “el Bala”, “el Bolo”, “el Boli”, “el Bulo” y no sé cuantos más, mostraban su arrepentimiento y disposición para abandonar la delincuencia e incorporarse a la sociedad civil, de forma íntegra, honrada y trabajadora, tras cumplir sus largas condenas. ¡Ver para creer!.

“¡Papá despierta, despierta que me parece que los Reyes Magos han llegado ya!”. Al poco rato:”¡Que sí papá, que sí, que han traído muchas cosas y a ti te han dejado una camisa, una corbata y una carta!”
La carta decía: “Querido VIGÍA, los sueños sueños son, aunque a veces se hacen realidad. Melchor”      
 Moraleja: “De ilusión también se vive y la esperanza es lo último que debemos perder”.
Así sea.
EL VIGÍA. .

       

domingo, 5 de enero de 2014

ARTÍCULO: LA INFORMALIDAD MÁS INFORMAL,

           



Si mis amigos de la fábrica de General Motors, propietaria de la marca Chevrolet, de Figueruelas en Zaragoza (España) vieran como trata algún concesionario de esa marca en ésta localidad peruana a sus potenciales clientes se echarían las manos a la cabeza y no les extrañaría en absoluto el bajón de ventas de esos vehículos en el mercado europeo, a pesar de que allí el trato con el cliente es exquisito. El bajón de ventas ha sido tal que ha llevado a la dirección de General Motors a anunciar públicamente la eliminación de la venta de los Chevrolet en aquel continente a partir de finales del 2015, centrándose exclusivamente en la venta de Opel y Vauxall. Otro día les explicaré a fondo los motivos de tal decisión.

“¡Chicos, ya he cerrado el acuerdo de la compra del coche!, y mañana iré a probarlo con el vendedor” les anuncié a mis hijos el jueves  5 de éste mes. Éstas fueron mis primeras palabras, iluso de mí, al llegar a casa al mediodía. “¿Y qué coche has comprado papá?” preguntó mi pequeño de cinco años. “Uno muy bonito, que te gustará hijo” Y continuó: ¿Es grande y tiene de todo papá?”. “Si hijo, es grande y tiene de todo pues es Full Equipe”.
El día anterior miércoles 4, había pasado con mi mujer por el concesionario y ante la ausencia del vendedor de costumbre fuimos atendidos por otro conocido que nos lanzó una muy buena oferta que mostrándonosla  acababa de llegarle. La oferta era tentadora pues significaba el ahorro de unos 1,390 $ que para cómo están los tiempos era muy interesante. Como el modelo estaba en exposición, tanto mi mujer como yo le dimos el visto bueno pues nos gustó y quedamos en pasar al día siguiente por la mañana para ver y concretar con el vendedor que siempre me había atendido con anterioridad.
Al día siguiente por la mañana, reunido con el vendedor de siempre confirmó y emitió una proforma con su nombre por valor del importe anunciado el día anterior, o sea con el ahorro de unos 1390 $. Resulta que por fin había salido la super oferta esperada de Diciembre. A mi pregunta de si necesitaban algo más, pues el pago lo haría al contado, se me dijo que les ingresara una cantidad de 1000$, como señal de compromiso para la adquisición, que sería cerrada una vez yo hubiera probado el vehículo. Ingresé inmediatamente los 1000$ en la cuenta que me dieron y les llevé el correspondiente voucher o comprobante, del que tuve la precaución de hacerme una fotocopia. Me fui a casa y anuncié lo que ya les he contado anteriormente
Al día siguiente, viernes 6, pasé para probar el vehículo, cosa al parecer extraordinaria y que no se concede a nadie, eso sí, pagando de mi bolsillo los taxis de ida y vuelta al depósito que está algo lejos. O sea, fui un auténtico privilegiado ante las costumbres imperantes en el lugar.
Una vez de vuelta a sus instalaciones al ir a concretar la entrega del importe total del vehículo el vendedor me dice: “Hay un pequeño problema”. “¿Y cuál es?” pregunté.”Pues que el Gerente de la empresa no autoriza el p”. Ahí, corté la conversación, cogí al vendedor del brazo y lo introduje en el despacho de la Gerente de Ventas, que ante mi solicitud de aclaración de qué ocurría me confirmó que “la Gerencia no les autorizaba el precio dado”. Que el precio real era unos 1390$ más y que tratarían de rebajarme todo lo que pudieran. Mi reacción fue rápida:”O aceptan el precio pactado, o me devuelven los 1,000$ depositados, inmediatamente”. La contestación de la gerente fue: El precio real no era el ofrecido y en lo referente a la devolución del adelanto ingresado sí, podían devolvérmelo pero que tenía que entender que ellos son una empresa muy grande e importante y que esas devoluciones requieren tiempo. Como finalmente así ha sido. Han tardado quince días en devolverme parte de los 1,000$ adelantados.
Al lunes siguiente, día 9, pasé acompañado por mi buen amigo y mejor abogado Julio Roncal, responsable de ACUREA que como saben ustedes es una entidad defensora de los intereses de los consumidores y que les recomiendo, pues además de gratuita es muy profesional. Muy amablemente se ofreció a acompañarme, a título personal.
En su presencia reiteré mi solicitud del precio  pactado o la devolución del adelanto efectuado mostrando la proforma. La Gerente de ventas, optó por la devolución, cuando pudieran, del adelanto y procedí a firmar una carta de solicitud de la devolución de 1000$. Solicité que la devolución la ingresaran en mi cuenta y ante su negativa, que corrieran ellos con los gastos. La entrevista fue tensa y desagradable por la actitud de quien debía suavizarla y evitar el enfrentamiento, teniendo por mi parte, que llamar al vendedor para que desmintiera a la gerente que intentaba desvirtuar la realidad, como así hizo el muchacho.
A todo esto mis hijos seguían preguntando, que pasaba con el coche, que no terminaba de llegar a casa.”Oye papá, ¿lo del coche es de verdad o es de mentiras?” me preguntaba el pequeño.
Nueve días después, el 18, recibí una llamada del vendedor, solicitándome si quería el retorno del adelanto o podía aprovechar el ofrecimiento del Sr. Gerente en el sentido de quedarme el coche al precio inicialmente ofertado y no me hacían el talón, pero tenía que decidir inmediatamente pues era una oportunidad única ya que el Gerente se iba de vacaciones al día siguiente y si no la perdería. Mi rápida contestación fue que me devolvieran mi dinero, y que posteriormente seguiríamos hablando de otros modelos. Cuanto les vengo relatando además de risible, demencial, desvergonzada, e impresentable actuación es rigurosamente cierto en todos y cada uno de los extremos.
Al día siguiente, jueves 19, pasé por sus instalaciones y se me entregó un talón nominativo que al cobrarlo en su banco tuvo unos gastos de 5$ que tuve que asumir. Cobrando finalmente 995$. Y por supuesto volvió a ofrecérseme la “ganga” ya totalmente desvirtuada y fuera de lugar, de acuerdo con lo que les narro a continuación.

Como resulta que no me ha gustado nunca defraudar a mis pequeños y el día 5 les había dicho lo que ustedes ya saben, a los pocos días, concretamente el día 14 sábado les llevé a mis hijos el nuevo vehículo que adquirí, más potente y amplio, de otra marca y concesionario, claro está que sin decirles nada a quienes me defraudaron y todavía no me han devuelto totalmente lo mío, pues me continúan faltando 5$, que al cambio son cerca de 14 soles o lo que es lo mismo un buen “cebichito”, mas el tiempo perdido, más las expectativas creadas, que todo sumado es bastante.
Así que estimados lectores, ya supondrán ustedes que jamás recomendaré que en semejante lugar se negocie algo pues igual que a mi pueden intentar tomarles el pelo a ustedes.

Moraleja: Si los demás concesionarios de Chevrolet  actúan como Neomotor conmigo, es muy posible que aunque por diferentes causas, ocurra lo mismo que en Europa: Que aquí tampoco se venda ni un solo coche de esa marca.
Así sea y feliz Año Nuevo a todos.
EL VIGÍA.