Como sabe el asiduo lector,
nuestra querida Poli, está terminando la secundaria y pronto iniciará sus
estudios en la facultad de Derecho, con la ilusión de que algún día llegará a
Fiscal o como dice ella: “mejor, Juez”. Con estas palabras no quiere decir que
será una mejor juez sino que puestos a elegir, mejor será hacerse juez. Lo
aclaro para aquellos que al leer no suelen hacer caso de las comas, cosa muy
extendida y así evitar los malos entendidos. Poli, es una alumna aventajada y
saca un excelente resultado de lo que está aprendiendo. Sus inquietudes son
constantes y lo patentiza con sus continuas preguntas sobre la sociedad actual,
los hechos que acontecen, la previsión futura de acontecimientos, etc. etc. Ha
adquirido mucha confianza conmigo, cosa que le agradezco, y todas las noches
cuando vuelve de las clases sobre las once y cuarto de la noche tras el saludo
de rigor y mientras va cenando iniciamos una tertulia junto con mi hija Tefi
que también está terminando la secundaria, aunque es bastante más jovencita. El
diálogo dura hasta pasada la medianoche y en el que principalmente Poli, más
madura, patentiza sus inquietudes, dudas o sutilezas sobre lo que ha estudiado,
ha ocurrido, o se cree que pueda acontecer. Así pues unos días hablamos del
sicariato, otros de los cupos, de la actuación policial, fiscal y judicial, de
la educación, de las jubilaciones, de los salarios, de la prensa oral, visual y
escrita, del deporte, de la economía, de la sanidad, de la prevención, de la
juventud actual, etc. etc, y hasta de sociología política. En fin de todo
aquello que acontece y que la prensa diaria se encarga de informarnos. Estos
últimos días le ha tocado el turno a las futuras elecciones del mes de Octubre
próximo. Y como en todos los temas que abordamos, lo hacemos con la mayor
claridad y sin temor de que tanto Poli, como Tefi o yo mismo nos cortemos o nos molestemos por los comentarios emitidos
por cualquiera de nosotros. En nuestras conversaciones la claridad es meridiana.
Como la crítica que hacemos siempre trata de ser constructiva nadie puede
sentirse molesto ante los comentarios que hacemos y por ello con toda
tranquilidad pueden ser emitidos, sin que nada ni nadie aludido pueda sentirse
maltratado.
El viernes pasado Poli
planteó el tema de la futura Ley para evitar los mandatos consecutivos tanto en
la presidencia de la Nación como de las Regiones. Tuve que aclararle que eso
era un “proyecto de Ley” y que como muy pronto, entraría en vigor al año
siguiente y no afectaría a nadie en las próximas elecciones de Octubre.” ¿Y por
qué se pretende crear esa Ley si estamos en una democracia? Preguntó Poli”.
“Pues –contesté- precisamente para potenciar la democracia y evitar el “Presidencialismo
o Caudillismo” cosa en la que es fácil caer cuando uno se aposenta, nunca mejor
dicho, en el poder”. “¿Qué quieres decir con eso Vigía?”. “Pues sencillamente
Poli, que la alternancia en el poder es sanísima, que evita el adormecimiento,
el absolutismo y sobre todo evita las malas inclinaciones que puede
proporcionar el poder. El poder por si mismo puede degenerar fácilmente y de
ser autoridad a ser autoritario hay sólo un paso y ese corto paso se potencia
con los largos períodos de poderío. Las largas permanencias en el poder siempre
han conducido ineludiblemente al “culto a la personalidad” en la que el
personaje central que ostenta el poder suele terminar considerándose superior o
poseedor de la verdad, pues siempre hay a su alrededor los aduladores
profesionales o de ocasión que potencian
en él esa creencia y la trasladan al hombre de la calle. Se crea un estado de
opinión generalizado en la que se da por normal y bueno aquello que de normal
no tiene nada y de bueno menos. A lo largo de la Historia ha habido casos muy
nombrados y con resultados nefastos que todos conocemos”
“Entonces Vigía, usted cree que el actual
Presidente de la Región no de vería repetir por tercera vez su mandato?”. Como
les decía al principio, y estarán leyendo ustedes, todos somos muy claritos y
directos en nuestras preguntas y también en las respuestas.” “Pues verás Poli,
lo que yo crea o deje de creer no hará que sea éste o aquel el futuro
Presidente Regional. El que tiene que tomar o no la decisión de optar o no, es
él y únicamente él y deberá respetarse su decisión pues está en su derecho. Él
tiene que saber varias cosas, que creo sabe: en primer lugar que una retirada a
tiempo es siempre y en todos los casos una victoria; en segundo lugar que si
segundas partes nunca fueron buenas, peor pueden ser las terceras, y también que
dedicar más atención a quienes más que quererle le adoran, que son sus
familiares directos, es algo prioritario
que le dignificaría y gratificaría en su vida privada y familiar que al
final es lo más importante en la vida. Y finalmente que al carecer de bienes
personales según su declaración jurada, retirarse políticamente durante una legislatura,
mientras trabaja en la contabilidad que es lo suyo en alguna empresa amiga, puede servirle para oxigenarse, renovar
ideas y hacer nuevos planteamientos para futuras alternativas, incluso acceder
a un curul limeño”. “¿Y entonces Vigía, cuál sería la alternativa en el actual espectro
político regional?”. “Pues mira Poli, en mi humilde opinión, una candidatura de
concentración” “ Y que quiere decir eso Vigía”.” Pues sencillamente que tanto
si se presenta otra vez el actual, como si no lo hace, el resto de
pretendientes a la presidencia en un rasgo de honestidad y generosidad deberían
unirse ante una situación tan delicada, y nombrar candidato a la presidencia al
más idóneo, bien por su edad, bien por formación, o bien por consenso. Pero esto
que sería lo más racional y lógico en una situación grave como la actual, me da
la sensación que no cuenta ni con la generosidad ni con la honestidad
suficientemente necesaria de quienes podrían hacerlo. Sería una pena desaprovechar
la oportunidad”.
“Lo que sí es importante
–continúa Poli- es tener presente que en Julio empieza a recibirse el Canon
Minero y si el actual presidente ha optado por continuar en su trabajo hasta
las elecciones podrá administrarlo directamente, lo que a él le corresponde
hacer, y no así si deja la presidencia el cinco de junio (ciento veinte días
antes de las elecciones) y tiene que ser otro, su sustituto provisional, quien
administre la llegada de esos recursos. Esta fue una experiencia vivida y no de
grato recuerdo hace unos años. Debería ser tenida muy en cuenta”.
Tercia Tefi y pregunta:” ¿Y
del diezmo, que me decís?” “ Pues que de diezmo nada de nada- contesta Poli- Lo
que empezó como el 10% ahora ya no es ni el 20%, ahora ha subido al 30% y sin
garantías de seguridad de llevarte la obra”. “No puedo creerlo Poli, eso me
parece una solemne barbaridad” le contesté. Y termina: “Mire Vigía, se nota que
usted no va por el mercado, mis fuentes son de toda solvencia y me aseguran
poniendo a San Pedrito por testigo que la corrupción está extendidísima y dan
pelos y señales de quién es quién en ese mundillo delincuencial de cuello
blanco. Son secretos a voces”. Y termina Poli: “Aquí y ahora el culto al dinero
se ha potenciado hasta tal extremo que si no te sale a borbotones por las
orejas es que eres un pobre desgraciado paria y el “todo vale” se ha instalado
en la sociedad hasta el extremo de que se ríen de ti si denuncias las diarias
corruptelas que inundan nuestra sociedad. Y te dicen: “Acaso es que crees que
vas a cambiar el mundo o conseguir algo?”
Pues sí mis queridas Tefi y
Poli, podéis cambiar la mentalidad de muchas personas y conseguir que duerman tranquila y profundamente todas las noches
como lo hacéis vosotras.
Moraleja: “Al mercado irás y
allí te enterarás de quiénes son los “pollos” que dominan el corral”.
Así sea.
EL VIGÍA.
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