Hace unas semanas se inició
el nuevo curso escolar 2015. En este curso que empieza se mantienen normativas
de años anteriores referentes a las etapas de Inicial, Primaria y Secundaria.
En esta última hay una novedad experimental acerca de ampliar en un grupo
reducido de centros el horario pedagógico a 9 horas. Se hace con el objeto de
intentar mejorar los resultados académicos de unos estudiantes cuyos
performances a la fecha de hoy no son excesivamente brillantes y personalmente
dudo mucho de su eficacia pedagógica. Una vez más y ya es la enésima, que los
pedagogos de renombre insisten en que el problema de falta de resultados no
está en función de la cantidad de horas dedicadas al estudio sino en la calidad
de las mismas. En qué es lo que se estudia y como se aborda ese estudio. Aprender
es una de las facetas más apasionantes a las que se puede enfrentar el
individuo, principalmente los niños y jóvenes. Cuando un estudiante está
verdaderamente motivado, está centrado, yo diría absorto en lo que está
aprendiendo. O sea que la solución está en salirse de la rutina, en innovar y motivar,
despertando el interés del educando en aprender. Nuestros roles sociales están
evolucionando a pasos agigantados y nuestro sistema educativo sigue anclado en
el pasado, en la monotonía, en la reiteración, en la memoria, en las tareas
extraescolares, en unos horarios demenciales y en algunos casos en unos
profesores endiosados, distantes y desfasados. Hay un par de aspectos antes
aludidos a los que quisiera hacer referencia en profundidad. Son los horarios
académicos y las tareas extra escolares.
En
lo que se refiere a los horarios, puedo asegurarles que son un auténtico
escándalo. ¿Cómo es posible que un pequeño de seis años, iniciando su etapa de
Primaria, se levante a las 6h., con las primeras luces del día, empiece su
jornada de trabajo como alumno a las 7,15h. de la mañana, cuando las calles
están todavía sin asear ni regar, y prolongue su estancia de actividad escolar
hasta casi las 3 de la tarde de forma continuada, únicamente interrumpida por un recreo de 10
minutos y otro de 20 y más tarde en su casa tendrá que sufrir las prohibidas
por decreto ministerial Tareas Escolares que bastantes centros privados obligan
a realizar a sus alumnos? O sea que el pequeño se chupa 7,5 horas de trabajo pedagógico
en la escuela, casi las mismas que un adulto en su actividad laboral. ¡Titanes!
Con el agravante de que al llegar a su casa va a tener que seguir laborando
pues así se lo exige su colegio. ¡Súper titanes! De esto, de las Tareas
hablaremos más tarde. Ahora sigamos con lo del horario. Este lamentable
horario, me da pudor decir escolar, origina serios trastornos sociales y
fisiológicos. Los trastornos sociales son de carácter familiar, pues se impide
que la celebración de la comida del medio día se haga en familia que es donde
tradicionalmente y con arraigo generalizado se ha venido haciendo, debilitando
de esa manera ese ente que es la
familia, tan necesario en nuestra estructura social. Y los trastornos fisiológicos
también son relevantes pues la falta de control y las prisas, durante la mal
llamada comida colegial originan trastornos digestivos que pueden conducir a
las gastritis crónicas y en muchos casos a la pérdida de peso. Sin olvidar los
problemas de sueño. Pues bien, esto parece no importar a la dirección de los
centros docentes que tienen establecidos esos horarios anacrónicos y que
cualquiera diría son puestos en práctica para una más temprana liberación del
profesorado y así poder continuar su labor
docente en otro centro o con sus clases particulares. Con lo fácil que
resultaría iniciar la jornada entre las 8 y 8,30h hasta las 12 ó 12,30h,
cumplimentando las 4 primeras horas pedagógicas matinales con las asignaturas
“fuertes” para dar paso a un descanso de dos horas en las que el alumno elige
si come en su casa o lo hace en el cole,
para a las 14 ó 14,30h. reiniciar las tareas “suaves” hasta las 16 ó 16,30 h. y
ahí dar por terminada la jornada, cumplimentando de esa manera las 6h.diarias,
30h semanales que el Ministerio de Educación ordena y que son más que
suficientes. En bastantes escuelas públicas
se implantaron horarios corridos para dar paso a dos turnos de escolarización
anta la falta de centros disponibles pero no es el caso de los colegios
privados que sólo utilizan uno. Y ahora pasemos a lo de las Tareas.
Esto de las Tareas en casa tiene mucha miga.
En mi opinión demasiada miga, como diría un buen panadero. Veamos. El
Ministerio de Educación del Perú, al igual que en países como Francia y España,
por poner un par de ejemplos, prohíbe desde hace varios años las Tareas en casa
por no considerarlas pedagógicas y conducentes muy posiblemente al estrés del
alumno y la discriminación familiar. Un niño de Primaria que ha pasado 7,5h. en
el aula, retornar a su casa para hacer un breve descanso y volver a reanudar su
actividad ante las Tareas, mal llamadas “Deberes” le puede originar un estrés
tremendo. Esto lo entiende cualquiera, menos al parecer los que más
responsabilidad educativa tienen. Y si además esas tareas son repetitivas,
aburridas y cansinas como suelen ser, el alumno se desconcentra, desmotiva y
pierde la ilusión por aprender. Y encima sus papás tienen el deber según el
colegio de dejar que el niño trabaje solo pero con su orientación, o sea no tan
solo, pues si así lo dejas, hace todo
menos lo mandado y cuando tratas de
orientarlo te dice la verdad: “Me canso, esto es muy aburrido”, por el tipo de tareas que se mandan. Esto en
lo referente a niños de primeros cursos de Primaria, pero agárrense ustedes a
partir de tercero u cuarto. Si las tareas que se mandan son para complementar o
reforzar lo no entendido en clase alguien puede creer que el alumno solo
conseguirá algo? ¿O habrá que reforzarle con clases particulares? Y aquí es donde
puede empezar la discriminación, pues no todas las familias están en esa
disposición mental y/o económica. La prohibición de las tareas escolares en
Inicial, Primaria y Secundaria tiene carácter nacional, tanto para centros
públicos como privados con el matiz de que en Primaria y Secundaria podrán
asignarse tares académicas para los fines de semana sin exceder de un tiempo de
dos horas para todas las áreas. Ver NORMAS Y ORIENTACIONES PARA EL DESARROLLO
DEL AÑO ESCOLAR 2015(Novbre 2014) y RESOLUC. MINISTERIAL 556-2014..
Lo
que sí parece es que el interés de los colegios que mandan Tareas, puede serlo para satisfacer a algunos padres y diferenciarse de
otros centros, al mismo tiempo que intentan destacar sobre los demás, a pesar del
riesgo que entraña para el alumno. Sin
duda que la tarea a realizar por los miembros del Área de Gestión Pedagógica de
la UGEL impartiendo sus conocimientos
sobre la legislación vigente, iría de maravilla para todos esos Centros
que se supone por desconocimiento, de forma reiterada vienen incumpliéndola. Lo
único que me resta es implorar a Santa Rosa de Lima, como patrona de todos los
peruanos para que vele por nosotros y sobre todo por la educación de nuestros
niños.
Moraleja:
“Dime de qué presumes y te diré de qué careces”
Así
sea.
EL
VIGÍA.